miriam quintana

Es la vida quien declama versos.

 

Soneto.

“Es la vida quien declama versos”.

 1

Etéreo   cielo bordado de los  sueños

Cual  hojarasca, rodando  seco el silencio,

Con manos al empíreo, el es benévolo,

Sin ecos cuantas veces los desvelos.

2

Detrás de mi ventana y sin invitarla

Testigo, ella de mi rubor en  llamaradas

Revolcados mis cabellos por sus manos,

Llenándome  de poesías el alma.

3

Me vi desnuda, desnudando sueños,

Unos de ajenjo y otros de bellos risos

Inmutables mis impulsos para ocultarlos.

4

En  crepúsculo quizás, de una luz dorada;

¿-Es  soledad quizás, suelta en las memorias?

“Es la vida quien declama versos”,