jaimen apolinar

LAMENTO

Se anidan atisbados los dolores

en el alma agónica del deseo

presente en la bruma del sonido,

donde las palabras se hacen vanas

y el poeta estando muerto sigue vivo.

 

Después de las luces del dolor

la oscuridad complace a la tristeza,

habitando entre nieblas,

descubriendo el eco atiborrado de recuerdos.