Ramón Bonachí

OCTUBRE


Las hojas de otoño,
desnudan el árbol
que las vio nacer,
terminan su trabajo
alzando el vuelo,
pero caen deprisa
hasta besar el suelo.


Visten el camino
de paz y sosiego,
tejiendo alfombras
de maduros colores
para esos lentos paseos,
de días cortos,
de escasas flores.


Viene Octubre

aunque alguien lo haya olvidado,
quedara alguna rosa
secándose en la mesa,
a su lado un vaso sin usar
y una botella de vino,
que se quedo sin terminar.


En los cristales de la ventana
asoman nuestros corazones,
hechos con el vapor
que sueltan nuestras bocas,
y por los dedos húmedos
de nuestras manos locas.


El sol tímido y cansado,
se esconde de lado
detrás de la colina,
mientras, tú y yo,
disfrutamos del Octubre
comiendonos sus dias
junto al olor a hierba seca
de un bosque que se durmió.