Maferc

MARIA

Cómo se te pasa la vida María,

gastando las calles,

los tacones y las esquinas.

 

Corre a esconderte del alba, María,

que la mañana trae miradas,

niños, vírgenes y pías.

 

Vuelves a casa, enjuta y cansada,

con el cuerpo manchado

de manos, de besos y alcohol;

con los senos floridos e hinchados,

sagrados ante tanta miel y dolor.

Te acercas despacio a la cuna,

él te espera con las mismas ansias

que tú esperas a la luna.

 

Al mirarte se oculta la dama de los mil colores,

detrás de tiernos besos y arrullos,

que solo él te enseñó a dar.

 

Cómo se te pasa la vida María,

entre pañales y teteros,

entre hombres y bambalinas.