David Goya

Justicia David Goya (Palestina)

En horas despiadadas

-ladrona vil- de corazones,

dejaste mi alma destrozada,

y en mil pedazos mis ilusiones.

 

Robaste la paz de mi destino,

llevándote mi fe y mi alegría;

y ahora, no encuentro el camino,

por donde salir de la inmensa agonía.

 

Inocente y puro mi corazón te di;

y tú, lo tomaste con atroz hazaña;

débil e ingenuo fui,

ante las pérfidas palabras que solo engañan.

 

Tienes un lenguaje engañador y falso

castigo al cielo por vos yo pido;

que poco serían las tinieblas de un cadalso…,

algo mil veces peor te has merecido.

 

Ni siquiera “mil veces la muerte”-,

alcanzaría para pagar tu engaño;

a la distancia de mil años luz deberías perderte;

donde a nadie puedas hacer daño.

 

Solo al cielo pido castigo,

por el horrible dolor que has dejado;

y a sufrir mil veces yo te maldigo,

para que solo así pagues tu pecado.

 

Y aun así no me conformaría…,

por calmar mí cruel quebranto;

que más castigo para ti pediría,

multiplicado por cada gota de mí llanto.