Vanina Suárez

Real.-


Existe una paranoia enteramente ajena

que te envuelve en preguntas,

mientras tu sed de amor se va consumiendo

en la necesidad de perder toda sensación humana.

 

Pregúntate cuántos sueños perdiste,

despiértate, la vida son instantes reales.

Conoce el dolor, y quítate el olor a silencio

deseando, soñando, hablando por lo que sólo sientes.

 

Tu cuerpo vivo y tu mente atrofiada,

vas tirando al fuego la verdad,

y te conformas con tu “pensar idílico”

que sólo te transforma en un ser sin habilidad de amar,

llorar y luchar por su propio ideal.

 

Me resisto a esta pedante vida,

presumida hasta en el frío de tu sombra.

Las respuestas están dentro de uno mismo

así de simple, aunque quieras decorarla,

es mejor decirlo porque sentís y no por falta de juicio propio.

 

Todo lo que quieras ser,

caerá por miedo a la verdad. 

Yo sólo recuerdo

lo que pudiste ser.