Franklin Sandi

Cuando la tarde se astille

 

Cuando la tarde se astille en los cristales

Y no lleguen palabras pintadas de fuegos fatuos

Cuando desnude mis metáforas

Cuando regrese a sus muslos

Cuando en silencio adivine

Los mundos que hay en sus ojos

Cuando no me duela el paso que se va

Ni el paso nuevo que llega

Cuando aprenda a comer una sola vez al día

Cuando pueda mirarme sin ocultar mis vacíos

Y mis poses y mis gritos contenidos

Cuando transmute las horas agrias

Y se borren los gritos de los patios hondos

Cuando al fin asesine este espejo

Ya no hablaré de ventanas sin luz

Ni de caídas ni de puertas clausuradas.