Cuando las lágrimas fluyen por un dolor vivido, las palabras dichas en lo adelante, ofenderán y rayarán la luz del alma, de quien las escuche, Lo creíble así sea jurado ante Dios, mutará en lo increíble de escuchar y creer aunque mas se ansíe que así sucediera, para poder minimizar al menos, las lágrimas que se derraman y engañar a ese pobre corazón, que en las noches pide paz, amor y libertad de las cadenas del martirio, de llorar hasta lágrimas de sangre, cuando ya no hay que llorar, Ahora la compasión no existe que aminore el sufrir vivido y más si se sabe que a la final, todo lo que se pueda decir en adelante, serán falsas promesas que incumplidas quedarán a la final, si un perdón floreciera, para continuar unidos, La desconfianza nació y lo peor ya fue hecho..., No hay vuelta atrás al ser descubierto in fraganti, porque las cosas antes de hacerlas, debieron pensarse muy bien al tener presente a quién puedes herir de hechos o palabras u omisión y lo correcto era no haber caído nunca en tentación, cuando se sabe que pudo ser evitado, respetando y conformándote con lo que se tiene, si en la mente y tu propio corazón, la llevas, Cuando de lágrimas se trata, Un corazón herido siempre sabrá muy bien, lo que es vivir, sentir y padecer, la agonía del llanto, cuando es, en silencio.
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Fénix en llamas
09/10/2006 06:00 PM.