ivan semilla

Deterioros naturales

El río es un mar de lágrimas

y esa canoa con vuelta de campana

una sonrisa ausente que ayer flotaba.

 

 

El sauce llora con los brazos caídos,

las piedras se resbalan en los pies del hombre;

y la luz se apaga cuando mas se enciende

la glotonería de un poder enorme.

 

 

Toda finitud no se tiene en cuenta

la inmortalidad parece instalarse

y en el espejísmo del agua se sueltan

las estupideces, la codicia, el hambre.