El 3 de febrero de 1960 llegó al mundo en la ciudad costarricense de San José la escritora y actriz Ana Soto Marín, a quien el público y los amantes de la literatura conocen bajo el seudónimo de Ana Istarú.
Esta mujer que debutó como poetisa en la adolescencia heredó de sus padres la pasión por las artes. Según contó la autora en una oportunidad, su progenitor le inculcó el amor por las letras, mientras que su madre la acercó al universo teatral.
Su primer libro editado, un poemario, se tituló “Palabra nueva”. Después llegaron “Poemas para un día cualquiera” (obra que resultó galardonada por la editorial Costa Rica), “Poemas abiertos y otros amaneceres” y “La estación de fiebre”. Con esta última propuesta, surgida en 1983 (época para la cual ya había completado en la Universidad de Costa Rica su especialización en Artes Dramáticas), Istarú logró consolidarse como escritora y comenzó a captar la atención de editoriales, colegas y lectores extranjeros.
La autora, que por algunos años estuvo casada con el profesor y pintor francés César Maurel, no sólo ha demostrado talento para escribir poesías, guiones cinematográficos, obras de teatro y columnas de opinión, entre otros textos, sino que también ha dado evidencias de sensibilidad artística arriba de un escenario (donde protagonizó varios espectáculos) y a través de la pantalla grande.
“Madre nuestra que estás en la tierra”, “Hombres en escabeche”, “Baby Boom en el paraíso”, “Poesía escogida” y “La cuna” son otros de los títulos que Ana Istarú desarrolló hasta el momento. Por estos y otros trabajos que se encuentran traducidos a un gran número de idiomas, la artista costarricense ha sido distinguida en múltiples oportunidades con reconocimientos como el Premio Latinoamericano EDUCA, la Beca Guggenheim, el Premio María Teresa León, el Premio Hermanos Machado de Teatro y el Premio Nacional de Dramaturgia, por citar algunos.
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